20 marzo, 2016

Otra vez no!

Llevaba unos días un poco de bajona videojueguil, después de conocer la noticia de que el EverQuest Next se cancelaba. Empecé un personaje en el EQ2 (sí, en serio) por ver zonas nuevas que no conocía (siempre jugué en Freeport; la única vez que vi Qeynos fue en una misión de espía) y largar un par de suspiritos "por los viejos tiempos". Que conste que me sigue gustando. Además, ahora me va mucho mejor que cuando lo jugaba yo. Ver lanzar los spells sin trompicones es MA-RA-VI-LLO-SO.

Pero ayer me decidí a comprarme el ARK - Survival Evolved. Ya lo había probado en un fin de semana que estuvo gratis en Steam, hace unos meses y, aunque iba bastante mal en mi ordenador, me había gustado la temática. Además, para decidirme del todo, un amigo que le está dando duro estos días me dejó probar cómo iba en mi PC antes de nada, por si acaso.

Gráficamente, los dinosaurios parecían de plástico cuando lo probé hace meses.

Entré y todo era más o menos como lo recordaba: caminar dándole a la E para ir recogiendo bayas, temer por tu vida al ver a cualquier dinosaurio, cómo subir niveles, cómo ir haciendo armas... Nacho (mi amigo) me indicó en qué servidor estaba y en qué zona, y quedamos en vernos para que me enseñara dónde tenía la base su tribu (como se llaman a los clanes) y así poder resucitar allí y hacerme la vida un poco más fácil, cosa que agradecí enormemente. Sin embargo, para poder unirme al clan tuvo que venir otra persona para invitarme (no sé si era el líder de la tribu o un oficial o qué).

Vamos a llamarle Manolo, por ponerle un nombre, porque no recuerdo cómo se hacía llamar in-game.


Tras explicarme cómo aceptar la invitación para unirme a su tribu, nos subimos en unos dinosaurios amaestrados, llamados los dos "Móntame" (tenía que haberlo visto venir, por el nombre de los pobres bichos) y me guiaron hasta donde tenían la base. De camino tuvo lugar una conversación la mar de interesante:

Manolo - Oye, me ha parecido que eres chica, no?
Yo - Sí.
Manolo - Genial. Pues ya verás, tenemos un dinosaurio para tí.
Yo - (Ay madre...)
Manolo - Lo tenemos desde hace poco y te va a encantar, ya verás.
Yo - (Va a tener muchos lazos, seguro; va a ser un dinosaurio horterísima en modo princesa Disney y no voy a saber reaccionar) Ah ^^
Manolo - Sólo para tí :D
Yo - (Que sí... Ay madre... A ver.)

Llegamos tras un par de minutos de trote en dinosaurio, mientras yo intentaba imaginarme todas las opciones posibles de dinosaurio "para chicas", buscando todos los estereotipos en mi mente: un stegosaurio con un lazito en la cabeza, un raptor con las uñas pintadas, un T-Rex con las bridas de satén y puntilla en la silla de montar...

Pero no. Me equivocaba de cabo a rabo: era un triceratops absolutamente rosa. Cuernos, piel, pezuñas... TODO ROSA. Menos los aparejos, que eran de cuero y metal normal, gracias a los dioses.


Manolo - Eh? A que te encanta! Sólo para tí :D
Yo - (¡mierda, no sé cómo reaccionar!) Pero qué coño le ha pasado al bicho este? Se cayó en la marmita del tinte o que?
Nacho - La verdad es que... de dónde ha salido esto?
Manolo - Pues nos pusimos a indagar ahí y decidimos hacer uno todo rosa, tío. Y claro, le llamamos Mariconosaurio.
Nacho - Mariconosaurio...
Yo - (... ay! qué ostia tienes, amigo; y no lo sabes) Ahá. Bueno, caminar camina bien (ya le cambiaré el nombre en cuanto pueda, pobre animalico).
Manolo - Y te puedes teñir las cosas eh? Te puedes teñir la ropa de rosa también.
Yo - Nah, qué va; si a mí me gusta el marrón sufrido.


Me puse a hablar con mi amigo Nacho sobre conceptos del juego, repasando lo básico para ir subiendo de nivel y aprender recetas. El juego es bastante completo, la verdad, y parece que tiene mucho para hacer. Pasado un rato noté que mi personaje estaba a punto de morir de hambre así que dije que me iba a poner a hacer filetes. Mi recién-asignado-porque-sí rosasaurio seguía por ahí paciendo, bajo la atenta mirada de Manolo, que llevaba un rato muy calladito.

Yo - Uf.. veía ya los bordes rojos en la pantalla en plan me muero YA xD
Nacho - Espera, tengo aquí un par también, píllalos.
Yo - Gracias, tío.
Manolo - Yo también tengo regalos para tí, eh?
Yo - (No fue suficiente con crear al pobre rosasaurio para que nadie quiera usarlo y esté sólo ahí en la casa? Tienes más regalos?) Pero no hace falta, hombre...
Manolo - Toma esto, esto y esto.

Recogí las cosas que había tirado al suelo y abrí el inventario para ver lo que eran: unas ropas de cuero. TEÑIDAS DE ROSA.

Yo - anda...
Manolo - Póntelas, póntelas! "Desnúdate para mí...!" Jajajajaja.
Yo - (Creepy... me acabas de conocer, pavo. Creepy.) ...

Y sí, me las puse. Eran mejores que las que tenía y mi personaje tenía frío. No, no me gustaban. No, no me gustaba el trato especial por ser chica. Pero sí, me las puse. Shame on me.

Yo, en la casa, con mis ropas de cuero rosas y el rosasaurio al fondo. Los dodos son amor :3


Manolo - Ya vas equipada total :D
Yo - Son mejores que las que tenía, de tela. Gracias. (Intentando dar énfasis a que me interesaban los stats y no el color).

Aproveché para darle a la Z, que hace que el personaje suelte un monumental mondongo de mierda. Como todo el color rosa que me estaba comiendo gratis.

Ya era tarde, tenía mucho machismo videojueguil que asimilar y dije que me iba a la cama. Tras un par de comentarios del estilo "uuhh.. mal comienzo en la tribu, te vas tan temprano" (eran más de la una de la mañana, los que me conocéis en persona sabéis que eso tarde para mí) no sé por qué pero llegó la siguiente frase:

Manolo - Cómo se nota que eres jugadora de LoL..
Yo - Justo.
Nacho - Uf.. Vamos. Bisholy, al LoL, ni con un palo xD
Yo - (amigos que molan! Nacho FTW! Mejor pasar del tío este, ya...) Hasta mañana.



Mientras se cerraba el juego no podía terminar de creerme la última hora de mi vida. Fue una auténtica regresión a cuando empecé a jugar online, hace 12 malditos años. Creí que íbamos avanzando en algo, pero parece que aún queda camino. Y la culpa en parte es de personas como yo, que no sabemos decir NO en el momento. Ahora me vengo arriba porque lo escribo con calma, después de haber dormido y haberle dado un par de vueltas. Y mentiría si dijese que no me planteé no escribirlo por si Manolo hace una simple búsqueda de mi nombre online y llega hasta aquí. Pero tenía que contarlo.

Hay una línea gruesa, visible, tangible, innegable, entre "jugadora novata que agradece un par de consejos del juego" y "regalar cosas porque es chica y necesita ayuda para empezar".

Trato diferente es discriminación. No queremos que nos tratéis diferente. Somos compañeros de juego, no importa que yo tenga tetas o me guste el Nestea o tenga el pelo azul. Nada de eso importa a la hora de pasar unas horas en un juego online. Manolo: si me quieres conocer, como persona, estupendo, pero:

-que me des un par de consejos o me guíes en cosas básicas al principio, está bien.
-que me trates de colega cuando me acabas de conocer es incómodo.
-que me regales cosas porque soy chica, es incómodo.
-que me regales cosas rosas porque soy chica, es humillante.
-que me susurres por chat de voz "Desnúdate para mí", cuando te acabo de conocer y en ese pequeño rato ya tengo claro que me has cosificado como "tetas que necesitan protección", es horripilante.


Y dicho esto, vuelvo al ARK, a ver qué se cuece hoy entre dinosaurios ^^


---------------------------